lunes, 6 de diciembre de 2010

La noche de día

Hace días que no sale el sol tras el horizonte , ni los cielos se tiñen de un azul mar , ni tan siquiera se divisa una lejanía cercana , la niebla lluviosa ha borrado hoy los detalles más ambiguos de esta ciudad .
Su brillantez se esconde bajo la inmensa capa gris que cubre hoy nuestros cielos .

Los días de lluvia son maravillosos , dije.

Abro los ojos , doy unas cuantas vueltas por mi cama , y finalemente estiro un poco el brazo derecho para levantar la persiana , todas las mañanas deseo ver el cielo , el mar , la hermosa soledad del sol al brillar .
Alguna que otra vez el cielo se oscurece , pinceladas grises destellan este inmenso horizonte , del mismo modo que lágrimas a veces recorren fronteras , pintadas de arrugas que provoca el desgaste de esta vida .
No todos los días serán buenos , no todos lo días desearás que no terminen , ni todas las horas quisieras eternas ; ni muertas . Hay ocasiones en las que la mejor opción es irse a dormir , esperar que llegue otro día , mirar por la ventana y ver el cielo grisáceo y la vida en escala ; de colores.

Así ha de ser todo , como te dé la real gana .

Y hoy me acuesto sin ver amanecer , la duda invadirá mis sueños , y me dará al menos una razón para despertar mañana ; querer que llueva hasta inundar la incertidumbre que anochece en mi desvelo , que no quiere acostarse sin despedir de sus labios todas las palabras, de las que debió desprender se antes de ver caer la lluvia en sus ojos .

buenas noches por la mañana , o cuando me venga en gana , pero que sean buenas siempre que puedan .

Ya puedo oír los truenos que retumban en la ciudad , mañana será un gran día .
Eso digo siempre, placenteramente , a mi placer , quiero ser .

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