El Principito tiene en su planeta una rosa que es especial para él, esa rosa especial le ha domesticado el corazón
Los labios que se encuentran en las oscuridad , para dar luz con sus besos a estas largas noches de pasión .
Puede carecer de sentido que se hallen dos cuerpos en la pelumbra de la noche , será la imantación que el deseo les proporciona lo que les atrae como polos opuestos , cuando tus ojos no ven más allá de los sentidos salen chispas de nuestras bocas que se apropian de la única claridad que existe bajo las sábanas y así poder recorrer cada rincón de nuestro cuerpo .
Dicen que al anochecer el ser humano se halla solo , vacío , anhelando cualquier cuerpo que dé cierta sensación de compañía , que llene sus camas y las recoja por la mañana , marchándose sin dejar rastro . Dicen que el ser humano no ama la soledad , por que necesita en esta vida acompañante para aprender a amar, y por eso no se acostumbra aún a dormir solo , ha no depender de esa necesidad .
Ella lo quiso un día , amó su soledad tanto como a sí misma , pasó noches tan largas como el tiempo que tardan las agujas de un reloj en recorrer la oscuridad , se desveló en muchas camas diferentes , con muchos hombres distintos , instinto femenino.
Pero un día , en una cama , en un lugar y con un hombre , consiguió dormir placidamente , rozándolo sin tocarlo , sintiéndolo sin estar demasiado cerca ,
besándole a la hora de los besos , lléndose seguramente pasada la hora de partida , y volviendo antes de hora , cuando nunca antes lo hizo , pero fue su elección ; el calor de los cuerpos desnudos con sus movimientos susurraban a su oído muy despacio , vuelve , vuelve . Y ella volvió .
Sutilmente cada noche sus cuerpos se rozaban más intensamente , se convertían más amenudo en uno , y pasaban más horas de las que debían desnudos , y digo debían , para no enamorarse .
Ella dejó de marcharse a la hora de la ida , dejó de llegar , tan sólo tardaba en irse , era ese afán suyo por descubrir hasta la mínima parte de su cuerpo opuesto , de su yan .
En el amor se habla de suerte , se considera afortunada a una persona felizmente enamorada , otros creen que es cosa del azar , de física cuando dos polos se atraen , y algunos de química cuando la combinación de ambos reacciona . Pero yo me permito el lujo de referirme al destino e incluirlo como un elemento más de nuestro experimento.
Y así las noches se hacían días , y los días noches , así las sábanas fueron se mojando progresivamente , los besos aumentando y este amor creciendo en mi
corazón , cuál rosa que nunca marchita , y florece la pasión sin ser primavera aún .
Amar es lo más peligroso que tiene la vida , dijo ella a sus pensamientos . Fruto de aquel falso engaño , más allá del desamor se frustró su desamparo , y así juro más de una vez no volver a amar , no volver a dejar entrar a nadie en su corazón , pero a veces los juramentos se rompen , en los caso más extremos , en las situaciones más adversas , en su mundo de contradicciones quiso volver a desdecirse , para emprender un nuevo valor del amor , de verdad .
Y quien sabe mañana , y quien supiera tantas cosas , pero a quien le interesa el final , quien no ama la intriga , quien no piensa en hoy , y si en mañana - yo , a veces-es evidente que las dudas ciernen mis pensamientos de miedos , no quiero que sea mentira , y volver a engañar a mi corazón con te quieros no sentidos , si no
dichos por decir . Y desdichos al final .
Le quiso por que él le dió razones suficientes para quererle .
Un príncipito que cuida su rosa , que día tras día la riega con amor , que nunca se le olvida que así y tan sólo así crecerá , que no hay otra forma .
Y la flor dijo en medio de un bostezo:
- ¡Ah!, acabo de despertarme...Perdóname...Todavía estoy toda despeinada...
El Principito, entonces, no pudo contener su admiración:
- ¡Qué hermosa eres!
- ¿Verdad? - respondió suavemente la flor-. Y he nacido al mismo tiempo que el sol...
"No debí haberla escuchado - me confió un día El Principito -; nunca hay que escuchar a las flores. Hay que mirarlas y aspirar su aroma. La mía
perfumaba mi planeta..."
Y me confió aún:
"No supe comprender nada entonces. Debí haberla juzgado por sus actos y no por sus palabras. Me perfumaba y me iluminaba. Debí haber adivinado su
ternura. ¡Las flores son tan contradictorias! Pero yo era demasiado joven para saber amarla."
Y cuando regó por última vez la flor, y se dispuso a ponerla al abrigo de su globo, descubrió que tenía deseos de llorar.
- Adiós- dijo a la flor. Pero la flor no contestó.
- Adiós- repitió. La flor tosió. Pero no por el resfrío.
-He sido tonta -le dijo por fin-. Te pido perdón. Procura ser feliz.
Quedó sorprendido por la ausencia de reproches. Permaneció allí, desconcertado.
- Pero, sí, te quiero -le dijo la flor-. No has sabido nada, por mi culpa. No tiene importancia. Pero has sido tan tonto como yo. Procura ser feliz...
- Es preciso que soporte dos o tres orugas si quiero conocer a las mariposas. ¡Parece que es tan hermoso! Si no, ¿quien habrá de visitarme? Tú estarás
lejos.
Después agregó:
- No te detengas más, es molesto. Has decidido partir. Vete.
Pues no quería que la viese llorar. Era una flor tan orgullosa...
Esa rosa puede ser princesa , puede ser flor , puede ser besos en la oscuridad , caricias entre nuestros pies por las noches , puede ser mi corazón , o el tuyo , pero sea lo que sea es , y por ello cuando algo has cuidado , cuando quiere has de cuidarlo para que nunca marchite , que sólo el tiempo sea capaz de hayar
Cuando te siento tan dentro que dejamos de ser dos para ser uno .
Rosas que no marchitan , labios que se buscan , corazones que se quieren , cuerpos que arden en la pelumbra fría del invierno , amores que se entregan cada día lo que corresponde para seguir latiendo hasta que se detenga el tiempo .
La respuesta es lo que no somos capaces de ver .
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